Fisker pausa su producción y busca una nueva ronda de financiación
La empresa de vehículos eléctricos enfrenta desafíos financieros y suspende la fabricación mientras explora opciones estratégicas.
Fisker Inc., conocida por sus innovadores vehículos eléctricos, anunció una pausa temporal en la producción de sus modelos, así como una estrategia de financiación para superar sus actuales dificultades que atraviesa.
La pausa afectará la fabricación de sus vehículos durante seis semanas. En este periodo la compañía espera recaudar hasta 150 millones de dólares mediante la venta de notas convertibles.
Una estrategia en medio de la tormenta
Este movimiento surge tras el incumplimiento de un pago de intereses. La empresa no produjo ninguna unidad de su SUV Ocean en enero, mientras que su socio manufacturero Magna, en Austria, ensambló aproximadamente 1.000 vehículos entre el 1 de febrero y el 15 de marzo.
El mecanismo financiero escogido, las notas convertibles senior aseguradas, incluye un descuento del 10% sobre el valor original, con la esperanza de generar ingresos brutos de hasta 150 millones de dólares. CVI Investments, gestionado por Heights Capital Management y con sede en Varsovia, es el comprador de estas notas, lo que les otorga la posibilidad de convertir esta deuda en acciones de Fisker.
Fisker ha decidido no realizar un pago de interés de 8.4 millones de dólares previsto para el 15 de marzo por algunas notas convertibles que vencen en 2026. La firma justifica esta decisión con la intención de utilizar un período de gracia de 30 días para renegociar la estructura de capital con sus inversores, a pesar de contar con la liquidez suficiente.
En medio de estas circunstancias, Fisker confirma estar en conversaciones con un importante fabricante de automóviles para explorar una transacción potencial, aunque no ha revelado el nombre de la compañía. Este diálogo podría ser crucial para el futuro de Fisker, especialmente después de que Reuters informara sobre negociaciones avanzadas con Nissan, que podría representar un salvavidas financiero para la startup.
Además, Fisker ha ajustado recientemente su estrategia de ventas, pasando de un modelo de venta directa al cliente a una dependencia de los concesionarios para la distribución y servicio.
