UE prevé aranceles de hasta 38,1% para automóviles eléctricos chinos
Este incremento tarifario del 10% al 38.1% afectará a grandes fabricantes como BYD, Geely y el Grupo SAIC a partir del 4 de julio.
La Unión Europea ha decidido incrementar los aranceles temporales a los vehículos eléctricos provenientes de China, una medida que podría escalar las tensiones comerciales entre ambas potencias.
Tras una investigación de ocho meses sobre subsidios, el bloque anunció que las tarifas podrían ascender hasta un 38,1%. Esta medida eleva la tarifa actual del 10% y busca responder a las prácticas de subsidio que la Comisión Europea considera desleales.
Impacto diferenciado según cooperación en la investigación
Los nuevos aranceles varían según la empresa y su colaboración en la investigación. Fabricantes como BYD, Geely y el Grupo SAIC enfrentarán tarifas de 17,4%, 20% y 38,1% respectivamente.
Aquellas empresas que no cooperaron con la investigación serán las más afectadas, recibiendo el máximo aumento. En contraste, las compañías que participaron activamente en el proceso tendrán un arancel impuesto del 21%. Curiosamente, los vehículos eléctricos de Tesla producidos en China serán tarifados de manera independiente tras la investigación.
El mercado europeo, que recibe casi la mitad de sus vehículos eléctricos importados de marcas occidentales como Tesla, Volkswagen y BMW, podría verse profundamente afectado.
Tesla domina este flujo con aproximadamente un 40% del total. Por otro lado, las marcas chinas, aunque menos representativas en número con ventas anuales menores a 200.000 unidades, enfrentan un escenario desafiante dado su menor cuota de mercado, inferior al 8%.
Reacciones y consecuencias a futuro
La respuesta de China no se hizo esperar. El Ministerio de Comercio del país asiático expresó su descontento y anunció que tomará todas las medidas necesarias para defender los derechos e intereses de sus empresas.
La Asociación China de Fabricantes de Automóviles también manifestó su profundo rechazo a la decisión, calificándola de completamente inaceptable.
En Europa, el temor a una posible guerra comercial entre China y la UE preocupa especialmente a Alemania. El Ministro de Transporte alemán, Volker Wissing, criticó duramente la decisión de la Comisión, argumentando que las tarifas punitivas perjudican directamente a las empresas alemanas y sus productos estrella.
Desde el sector automotriz, figuras como Oliver Zipse, presidente del Grupo BMW, y representantes de Volkswagen, han señalado que estas tarifas son un camino equivocado y perjudicial, especialmente en un momento de demanda débil para los vehículos eléctricos en Alemania y Europa.