Nissan suspende operaciones en su planta de Changzhou, China
La planta afectada representa el 8% de la producción de Nissan en el mayor mercado automotriz del mundo.
Nissan Motor ha anunciado la suspensión temporal de las operaciones en su planta de Changzhou, ubicada en China, como parte de un esfuerzo por optimizar su rendimiento y estrategia en la región.
Esta decisión es un reflejo de los continuos desafíos que enfrenta el fabricante japonés en el competitivo mercado automotriz chino.
Estrategia en un mercado competitivo
La planta de Changzhou, gestionada en conjunto con el socio local de Nissan, Dongfeng Motor, ha sido un punto clave en la producción del SUV Qashqai, con una capacidad anual aproximada de 130.000 vehículos. Este cierre representa el 8% de la capacidad total de producción de Nissan en China, que asciende a 1,6 millones de vehículos.
Este movimiento de la empresa ocurre en un contexto donde fabricantes japoneses como Mitsubishi Motors han comenzado a retirar su producción en China. Mitsubishi, socio de Nissan en una alianza de larga data con la francesa Renault, también puso fin a sus operaciones en su empresa conjunta china el año pasado.
Nissan, que opera ocho fábricas en China a través de su empresa conjunta con Dongfeng, ha visto una disminución en su participación de mercado frente a competidores locales.
Estos rivales han ganado terreno ofreciendo vehículos eléctricos cargados de software a precios comparables a los modelos con motores de combustión interna, lo que los hace muy atractivos para los consumidores modernos.
A pesar de estos retos, Nissan ha reafirmado su compromiso con el mercado chino, enfocándose en ajustar su estrategia para mantener su relevancia y competitividad en una industria que evoluciona rápidamente.
