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Análisis |

BMW y Toyota retiran casi 70.000 vehículos en China por motivos de seguridad

Las automotrices toman medidas preventivas tras un accidente mortal que encendió las alarmas sobre la seguridad de los vehículos eléctricos en el país

Tres de las principales marcas automotrices del mundo —BMW, Toyota y Mercedes-Benz— han anunciado la retirada del mercado de 69.793 vehículos en China debido a diversos riesgos de seguridad.

La decisión se produce después de un accidente fatal en marzo que involucró a un coche eléctrico de Xiaomi, lo que ha desencadenado una ola de medidas regulatorias por parte del gobierno chino para reforzar la seguridad en el sector automotor.

Defectos técnicos y riesgo de incendio

La Administración Estatal para la Regulación del Mercado (SAMR, por sus siglas en inglés) detalló el alcance del retiro, de acuerdo a South China Morning Post.

BMW comenzará, a partir del 25 de junio, la revisión de 26.766 vehículos producidos localmente y 80 unidades importadas por un fallo en el conector de alimentación, que podría provocar incendios.

Por su parte, FAW Toyota —la empresa conjunta de la japonesa Toyota en China— retirará 10.892 automóviles, incluyendo 93 importados, debido a pernos de suspensión flojos que podrían comprometer la estabilidad del vehículo durante la conducción.

Mercedes-Benz también se suma al esfuerzo, con una revisión de 31.874 unidades (incluidos cuatro vehículos importados) por riesgos de incendio y problemas en la instalación del sistema de drenaje de la condensación del aire acondicionado.

Además, la marca británica Genesis retirará 181 coches importados por fallos en el panel de instrumentos.

Respuesta a una creciente presión regulatoria

Esta revisión masiva, casi diez veces mayor que el del mes anterior, refleja una mayor vigilancia por parte de las autoridades chinas. El mes pasado, en la feria automotriz más importante del país en Shanghái, la seguridad vehicular fue el tema central.

Tras el accidente del Xiaomi SU7, que dejó tres muertos al estrellarse a más de 110 km/h con el sistema de asistencia al conductor activado, los reguladores han intensificado las normativas.

El Ministerio de Industria y Tecnología de la Información (MIIT) presentó nuevas exigencias para las baterías de los vehículos eléctricos y estudia estandarizar el diseño de las manillas de las puertas para facilitar el rescate en caso de emergencia.

Las autoridades también han advertido a 60 fabricantes sobre exagerar las capacidades de los sistemas de conducción autónoma, en un intento por recuperar la confianza pública en la tecnología.


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