
Elon Musk deja su rol en el gobierno de Trump para enfocarse en Tesla y SpaceX
Elon Musk abandona su rol en el gobierno de Trump y pone nuevamente el foco en sus empresas, mientras Tesla atraviesa una caída de ventas y SpaceX enfrenta desafíos técnicos.
Elon Musk ha decidido dar un paso al costado de su participación en el equipo de eficiencia gubernamental de Donald Trump, un movimiento que muchos inversores celebran con la esperanza de que ahora concentre su atención en los problemas que enfrentan sus empresas, en particular Tesla.
La decisión llega en un momento crítico. Las ventas de Tesla han caído, el valor de sus acciones se desplomó un 25 % desde diciembre y el más reciente lanzamiento de SpaceX terminó en una explosión sobre el Océano Índico.
Musk, quien había liderado el llamado Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), se distanció no solo del proyecto, sino también del entorno político, tras prometer reducir su gasto en campañas.
El año pasado, invirtió casi 300 millones de dólares en apoyar la reelección de Trump y otros candidatos republicanos, una acción que generó críticas tanto en el ámbito empresarial como político.
Tesla en el ojo del huracán
A pesar de la desvinculación de Musk con la Casa Blanca, los analistas insisten en que Tesla necesita mucho más que un cambio de imagen para recuperarse.
Según Seth Goldstein, analista de Morningstar, “la salida de Musk del DOGE puede mejorar el ánimo del mercado, pero no cambia el panorama operativo actual”. Tesla enfrenta una fuerte competencia en EE. UU., Europa y especialmente en China, donde los consumidores optan cada vez más por otras marcas de vehículos eléctricos.
Mientras tanto, el lanzamiento de los esperados robotaxis sigue en pie para el próximo mes. Musk aseguró que Tesla ya está probando modelos sin conductor en Austin, Texas, y que los primeros vehículos podrían llegar a clientes en junio.
Esta iniciativa es clave para reposicionar la compañía, junto con el desarrollo de su robot humanoide Optimus.
Relación con Trump y mirada hacia el futuro
Aunque ya no forma parte del gobierno, Musk mantiene conexiones. Según Reuters, su equipo seguía colaborando con agencias federales, usando inteligencia artificial para analizar datos. Este vínculo ha despertado suspicacias sobre el acceso privilegiado a información gubernamental.
Por otro lado, SpaceX, liderada por Gwynne Shotwell, sigue siendo dominante en el mercado aeroespacial, aunque el último fracaso del cohete Starship impone una pausa en los planes de llevar humanos a la Luna o Marte. Musk anunció que dedicará más tiempo a SpaceX para acelerar el desarrollo.