
Crisis interna en Nissan desata críticas de accionistas durante su asamblea anual
Accionistas exigen responsabilidades al nuevo CEO y denuncian recortes mientras la empresa profundiza sus pérdidas.
Nissan atraviesa una de sus peores crisis en años, y sus accionistas no se quedaron callados.
Durante la asamblea general anual celebrada en Japón, varios de ellos cuestionaron con dureza la gestión de la compañía, exigiendo mayor rendición de cuentas por parte de la directiva frente al declive sostenido del tercer mayor fabricante de automóviles del país, de acuerdo con una publicación de Reuters.
La reunión marcó el debut de Ivan Espinosa como nuevo CEO, quien asumió el cargo en abril en reemplazo de Makoto Uchida. Sin embargo, su llegada no ha calmado las aguas.
La empresa reportó una pérdida neta de 4.500 millones de dólares en el último ejercicio fiscal, suspendió el pago de dividendos y estima pérdidas de 200 mil millones de yenes (unos 1.380 millones de dólares) solo en el primer trimestre de este año.
Protestas y propuestas rechazadas
Durante la asamblea, algunos accionistas expresaron su malestar por los profundos recortes anunciados por Espinosa, que incluyen el cierre de siete plantas y la eliminación de 20.000 empleos —el 15% de la plantilla global—.
Uno de los presentes acusó a la directiva de «trasladar su responsabilidad a los trabajadores de primera línea», mientras ellos mantienen sus puestos sin cambios. Otro lamentó directamente la eliminación del dividendo.
Pese al descontento, los accionistas rechazaron varias propuestas impulsadas por el fondo activista Strategic Capital, entre ellas una que obligaría a Nissan a revisar anualmente su relación con Nissan Shatai, una filial cotizada de la cual posee el 50 %.
Presión externa por mejorar la gobernanza
Las llamadas «cotizaciones madre-hija», como la de Nissan y Nissan Shatai, están bajo la lupa de la Bolsa de Tokio y los reguladores, quienes consideran que perjudican a los accionistas minoritarios y entorpecen la transparencia.
Toyota, por ejemplo, anunció recientemente un acuerdo de 33 mil millones de dólares para adquirir totalmente a su subsidiaria Toyota Industries, en un intento por mejorar su estructura corporativa.
Tsuyoshi Maruki, CEO de Strategic Capital, señaló a Reuters que espera que Nissan también afronte este tipo de decisiones con seriedad: «Toyota sintió la presión de los accionistas y entendió que debía cambiar», afirmó.