
Audi acelera su apuesta eléctrica pese a caída general en entregas
La automotriz alemana reportó un sólido crecimiento en sus ventas de vehículos eléctricos, aunque sus beneficios bajaron debido a aranceles y costos de reestructuración.
Audi cerró la primera mitad de 2025 con resultados financieros mixtos. Mientras sus ingresos aumentaron un 5,3 % hasta los 32.573 millones de euros, su beneficio operativo cayó a 1.087 millones, frente a los 1.982 millones del mismo periodo del año anterior.
Según el comunicado de prensa, la compañía atribuye este descenso al impacto de los aranceles estadounidenses y a los costes derivados de su plan de transformación interna.
A pesar de este contexto complicado, la marca logró un hito importante: las entregas de vehículos 100 % eléctricos crecieron un 32 %, superando las 101.000 unidades en todo el mundo.
Los modelos más populares fueron el Audi Q4 e-tron (45.000 unidades) y el Q6 e-tron (36.000). En mercados como Francia, los Países Bajos y Alemania, las ventas de eléctricos aumentaron hasta en un 196 %.
Transformación profunda para un futuro eléctrico
Audi está inmersa en una transformación histórica. Con su «acuerdo para el futuro», busca reorganizar su estructura operativa para ahorrar más de 1.000 millones de euros anuales en el mediano plazo.
Este plan incluye una ambiciosa renovación de su portafolio de productos: solo en 2025, la marca lanzará diez nuevos modelos híbridos enchufables.
«El panorama sigue siendo complicado, con una competencia feroz y nuevos aranceles que han afectado nuestros márgenes», explicó Jürgen Rittersberger, CFO de Audi. «Nuestros resultados financieros muestran claramente la urgencia de esta transformación».
La movilidad eléctrica gana fuerza en Europa
Europa lideró el crecimiento de los BEV (vehículos eléctricos de batería), con más de 53.000 unidades vendidas fuera de Alemania (+46 %). En su mercado local, Audi entregó cerca de 21.000 eléctricos (+76 %), contribuyendo a un leve crecimiento del 1 % en el total de entregas nacionales.
Sin embargo, las cifras globales fueron menos alentadoras. Audi entregó un total de 783.531 vehículos en el primer semestre, una caída del 5,9 %. El mercado chino fue el más afectado, con un descenso del 10 % debido a la feroz competencia.
Pese a los desafíos, Audi mantiene su meta para 2025, que es alcanzar ingresos entre 65.000 y 70.000 millones de euros, con un flujo de caja de entre 2.500 y 3.500 millones.