La baja demanda obliga a reducir precios en semiconductores en Taiwán
Las principales foundries taiwanesas ajustan sus precios debido a la débil demanda en procesos maduros, con reducciones que podrían continuar hasta 2025.
Las foundries de semiconductores en Taiwán enfrentan una caída en la demanda, lo que ha provocado ajustes en los precios de los procesos maduros de fabricación, según un reporte del Economic Daily News, citado por Trendforce.
En el cuarto trimestre de 2024, las empresas han comenzado a ofrecer descuentos para atraer órdenes, marcando un cambio respecto a la estabilidad observada en el tercer trimestre. Esta tendencia podría mantenerse hasta el primer trimestre de 2025, lo que llevaría a dos trimestres consecutivos de bajas en los precios.
UMC, VIS y PSMC ajustan su estrategia
Compañías clave como United Microelectronics Corp. (UMC), Vanguard International Semiconductor Corp. (VIS) y Powerchip Semiconductor Manufacturing Corp. (PSMC) se encuentran en el centro de estas reducciones.
UMC informó que sus precios en el tercer trimestre de 2024 se mantuvieron estables, y que revelarán los detalles para el cuarto trimestre en su próximo reporte financiero. VIS, por su parte, planea compartir su perspectiva para el final del año durante la presentación de sus resultados.
VIS había anticipado que el entorno competitivo mejoraría en este trimestre, con una recuperación en las tasas de utilización de sus instalaciones. Se espera que estas tasas alcancen entre el 70% y el 80% en 2025, dependiendo de la demanda.
ICs de gestión de energía, los más afectados
La baja demanda de circuitos integrados (ICs) de gestión de energía y controladores de pantalla es el principal motivo detrás de las presiones de precios en los procesos maduros. Se prevé que los precios de estos componentes disminuyan entre un 1% y 9% durante los próximos dos trimestres.
En contraste con sus pares taiwaneses, las foundries chinas han mantenido sus precios estables en este período. Fuentes del sector señalan que algunas empresas taiwanesas están ofreciendo reducciones para mantener altas las tasas de producción, mientras que las fábricas chinas, con mejores niveles de utilización, no han sentido la necesidad de hacer lo mismo.
Las negociaciones para el primer trimestre de 2025 continúan, y aunque se esperan algunos ajustes, no se prevén caídas significativas en los precios.