
Recortes en NIST podrían retrasar fondos del CHIPS Act
El plan de despidos en el Instituto Nacional de Estándares y Tecnología (NIST) podría afectar la distribución de fondos del CHIPS Act, impactando la manufactura y la investigación en EE. UU.
La distribución de los fondos del CHIPS Act, destinados a impulsar la industria de semiconductores en EE. UU., podría enfrentar demoras debido a los recortes de personal en el Instituto Nacional de Estándares y Tecnología (NIST), parte del Departamento de Comercio.
Según informes de Bloomberg y The Register, hasta 500 empleados en período de prueba podrían ser despedidos como parte de la reducción federal impulsada por el presidente Donald Trump.
Un golpe a la administración de los fondos
El NIST desempeña un papel clave en la gestión de los $53.000 millones del CHIPS Act, supervisando incentivos para la manufactura de chips y el desarrollo de estándares de inteligencia artificial.
Sin embargo, los despidos podrían reducir en un 60% el personal encargado de administrar $39.000 millones en incentivos para la producción y en dos tercios los empleados que gestionan $11.000 millones en investigación y desarrollo.
Estos recortes llegan poco después de que Howard Lutnick asumiera como nuevo secretario de Comercio y de que Trump anunciara un posible arancel del 25 % a los semiconductores importados.
Algunos analistas consideran que los despidos podrían ralentizar la distribución de fondos, dando margen al Congreso para revisar la ley antes de que se asignen todos los recursos.
Empresas beneficiadas y posibles efectos
Empresas como Intel ($7.860 millones) y Micron ($6.165 millones) están entre los principales beneficiarios de los subsidios del CHIPS Act, al igual que fabricantes de equipos de semiconductores como Applied Materials y Lam Research.
Además, TSMC, que ha estado en el centro de atención por un posible acuerdo con Intel, recibirá $6.600 millones para construir tres fábricas avanzadas en Arizona, de los cuales ya ha recibido $1.500 millones, según CNBC.
Si los recortes en el NIST afectan la gestión de los fondos, las empresas podrían enfrentar retrasos en sus proyectos, lo que pondría en riesgo los avances en manufactura y desarrollo tecnológico dentro de EE. UU.