BYD y BBVA México se alían para impulsar la movilidad eléctrica en el país
El fabricante chino y el banco anuncian un acuerdo estratégico con financiamiento preferencial para vehículos eléctricos e híbridos enchufables.
La automotriz china BYD y BBVA México firmaron una alianza estratégica con el objetivo de facilitar el acceso a vehículos eléctricos e híbridos enchufables, tanto para clientes individuales como para distribuidores.
El anuncio refuerza un memorando de entendimiento previo entre ambas compañías y forma parte del plan de expansión comercial de BYD en el país.
El acuerdo contempla condiciones financieras preferenciales, con esquemas pensados para distintos perfiles de usuarios.
Entre ellos se incluyen planes de financiamiento tipo “balloon”, que ofrecen pagos mensuales reducidos y una cuota final más flexible; arrendamientos personalizados para personas físicas o empresas; y opciones completamente digitales a través del portal de BBVA México.
Financiamiento inteligente para movilidad sostenible
Jorge Vallejo, director general de BYD México, destacó que esta colaboración representa un paso clave en su estrategia de crecimiento:
“Queremos facilitar el acceso a nuestros vehículos con soluciones financieras, inteligentes y confiables, que reflejen el compromiso de ambas marcas con el futuro de la movilidad”, explicó.
Además de los beneficios para el público, la alianza también contempla apoyos para la red de distribuidores de BYD. Estos contarán con líneas de crédito con condiciones preferenciales, lo que les permitirá robustecer tanto su operación comercial como su infraestructura de servicio postventa.
Un mercado en expansión
Con esta sinergia, BYD busca aprovechar la base de más de 30 millones de clientes de BBVA México para extender su presencia en el mercado nacional. La estrategia no solo apunta a colocar más vehículos eléctricos en las calles, sino también a fomentar una cultura de movilidad sostenible.
Según informó el medio Mexico Now, esta alianza se inscribe en un contexto de creciente interés por la electrificación del transporte en México, donde los consumidores y las empresas comienzan a ver en estas tecnologías una opción viable y competitiva.
